El coordinador del gabinete estatal en Juárez, Óscar Ibáñez, dijo que no hay todavía logística para recibir a los migrantes que eventualmente serán deportados por Estados Unidos, como lo advirtió Donald Trump.
“El gobierno que va a empezar anunció una acción, pero todavía no dicen cómo la va a hacer”, dijo ayer al ser abordado sobre la estrategia de las autoridades.
Mencionó que ya se ubicaron algunos puntos para colocar carpas, pero no se va a proceder hasta que se haga efectiva la repatriación.
Por su parte, el secretario general de Gobierno, Santiago de la Peña, afirmó que en las reuniones de la mesa de seguridad, el tema del relevo presidencial en Estados Unidos y una deportación masiva ha estado presente.
“Es uno de los temas que se han tratado además de los reportes de seguridad”, dijo, aunque no abundó en las estrategias que se han analizado.
“Lo que se han ubicado son espacios para habilitar (carpas), pero no los pueden habilitar ante una expectativa que aún no se materializa”, subrayó también Ibáñez.
“No sabemos de qué tamaño, de qué manera irá a hacer; entonces, una vez que se tenga eso, la práctica, ya se tienen los lugares y los recursos para poder reaccionar y activarse a eso”, agregó.
Se esperan 2 mil 500 mexicanos por Juárez
A finales del año pasado, el recién nombrado titular del Consejo Estatal de Población (Coespo), Enrique Serrano Escobar, dijo que Estados Unidos estaba planeando la deportación por Juárez de 2 mil 500 mexicanos, todavía en la era de Joe Biden.
Para eso, afirmó: “Estamos consiguiendo espacios con otras instituciones para recibir a un grupo de mexicanos que serán repatriados en enero, esto junto con el Gobierno federal. Voy a establecer contacto con los otros órdenes de Gobierno para coadyuvar en una buena coordinación los tres”.
Este escenario es aparte de la expulsión que ha prometido el nuevo presidente norteamericano, Donald Trump, dijo Serrano.
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