Unos 30 migrantes que se quedaron sin poder acudir a su cita programada a través de la aplicación CBP One, tras las nuevas disposiciones del gobierno federal de los Estados Unidos, acudieron esta mañana al puente Santa Fe con la intención de protestar.
Trataron de ponerse de acuerdo para bloquear los accesos, pero declinaron ante la invitación de personal de la Comisión Estatal de Población (COESPO) de ir a sus oficinas para dialogar.
Hombres y mujeres jóvenes, algunos niños, estuvieron por casi una hora enfrente de las casetas de cobro de peaje del puente Paso del Norte y se retiraron para no exponerse a las bajas temperaturas.
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